La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció este martes que el Gobierno de México ofrecerá una reparación integral del daño a las personas afectadas por el descarrilamiento del Tren Interoceánico, accidente ocurrido el domingo 28 de diciembre en el Istmo de Tehuantepec, en el estado de Oaxaca.

El tren, que conectaba Salina Cruz (Oaxaca) con Coatzacoalcos (Veracruz) y forma parte de uno de los proyectos de infraestructura más ambiciosos del país, se descarriló con aproximadamente 250 personas a bordo. El siniestro dejó al menos 13 personas muertas y 98 lesionadas, de acuerdo con autoridades federales y reportes internacionales.

Durante la conferencia de prensa desde Palacio Nacional, Sheinbaum detalló que ya se están realizando las diligencias correspondientes con la Fiscalía General de la República (FGR) para determinar las causas del accidente, incluida la revisión de la caja negra del tren y otros peritajes especializados.

Subrayó que el apoyo a las víctimas y sus familias no terminará con un pago inicial, sino que se llevará a cabo una evaluación formal para otorgar reparación integral del daño, conforme a lo que determine la investigación. Como primer paso, explicó la mandataria, cada familiar afectado recibió un apoyo de 30 000 pesos para cubrir gastos urgentes, aunque aclaró que este monto es temporal y no sustituye la compensación definitiva.

Sheinbaum también indicó que el Gobierno asignó un servidor público a cada familia para apoyar de manera permanente en trámites y atención emocional, legal y médica, así como garantizar comunicación directa entre las autoridades y los afectados.

Además de la intervención de la FGR, la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario está realizando su propio dictamen técnico con estándares internacionales, y se buscará una certificación externa independiente antes de reanudar operaciones completas en la ruta afectada.

La tragedia ha generado la movilización de diversas instituciones de salud y emergencia. Al menos 36 personas continúan hospitalizadas en distintos centros médicos, donde reciben atención especializada y acompañamiento permanente.

El accidente ha reactivado el debate sobre la seguridad y la supervisión de los grandes proyectos de infraestructura del país, que en los últimos años han tenido otros incidentes relacionados con sistemas ferroviarios.