Edgar Prz
Estos días se han significado por la calentura política y social que van tomando diferentes actores y luchadoras del Pancracio. Los golpes, piquetes de ojo, chismes, rumores, patadas, empujones, gritos son parte del arsenal que cada uno tiene bajo su custodia. La fiebre Lozoyista está invadiendo el estado y contagiando a más de uno, para aprovechar el desconcierto generado por la entrega de bolsas repletas de billetes a personal al servicio del Partido Acción Nacional.
El video en sí causó furor mediático pero jurídicamente no tiene validez. La Suprema Corte invalida cualquier acción que se manifieste públicamente o se exhiba antes del juicio. El Fiscal Gertz Manero atajó los rumores y aclaró que para ellos no tiene ningún valor el video.
El Presidente López Obrador en su clásica mañanera al presentarlo le da el cariz de oficial, de creíble, de verdadero; para los efectos de los medios y propósitos electorales tiene un precio incalculable. La intención se ha visto no es castigar culpables sino aprovechar la cauda de enojo, molestia que tiene la gente por como se comportaba la política. Servirá para destruir pasados pero no para construir futuros que refuerzen y revitalizen la reumática democracia mexicana. La entrega de sobornos no es privativa de nuestro país; es práctica mundial, es la moda para avanzar y lograr acuerdos, según algunos.
No sé sabe con exactitud las fechas de dicha entrega ni se sabe lugar donde se llevo a cabo. Tampoco si eran parte de Obedrecht para Pemex o de Pemex para que se reparta. Las personas que hacen la entrega no aparecen, lo que presume es un video calculado y hecho con total alevosía y ventaja. Encuadra perfectamente en la narrativa Presidencial de demostrar como se conseguían los apoyos y votos para tal o cual iniciativa. La corrupción en pleno, la repartición del pastel a manos llenas, el favoritismo a los personajes políticos que hoy están como las tuzas, guardados debajo de la tierra con piedras y lodo encima.
El pueblo exige justicia, el pueblo clama castigo -pero- eso puede esperar. Hoy la urgencia es que se sepa y se conozca, se desnude a los Partidos. En este le tocó al PAN, en virtud que es el Partido con el mejor perfil electoral, es la opción que le puede arrebatar el triunfo a Morena; dice el refrán “la política es como el amor, para conseguirlo se vale de todo”. La dirigencia del PAN ha dicho que se castigue a los culpables, de confirmarse los hechos es inmediata su expulsión del Partido, no solaparan actos inmorales ni que vayan contra sus principios. La guerra mediática está con todo, no hay freno, no hay límites menos respeto. El pueblo como en el Coliseo de Roma quiere ver sangre, quiere ver caídos y varios están en el paquete. Aquel México que visualizó Cosío Villegas esta hoy hecho ruinas, salió viciado de origen; se están dando a conocer los secretos que celosamente guardaba el estado mexicano, se perdió la secrecía y se hizo válido el lema “ el que no tranza no avanza”.
México es un país en llamas, está ardiendo y toda la información que está dando a conocer Lozoya puede afectar a todos, incluido el nuevo patrón y el declarante. Son momentos difíciles por la encarnizada guerra de los cárteles, la Pandemia del Covid con afectaciones muy significativas y por la lentitud en la activación económica; por eso todo debe tratarse con pinzas con finura para no instigar a un movimiento social.
Hay voces que señalan la presencia de una extensa cortina de humo para bajar de las marquesinas políticas los temas del fracaso en la atención de la pandemia, (hasta Gatell parece sparring del Canelo por lo golpeado que esta), del decrecimiento de la economía, del fuego amigo dentro del Gabinete Presidencial, de la lentitud con que se avanza en los planes y programas, el pleito con los gobernadores, en fin, cada quien tendrá su propia opinión. Lo cierto es que continuarán las sorpresas y al pueblo como en la Antigua Roma lo entretendrán con Pan y Circo. Mejor seguiré caminando y tarareando un éxito de la Sonora Santanera “que se cuiden todos,hey hay viene el mudo” ….
