Alemania generalizará las restricciones específicas para las personas no vacunadas, como excluirlas de determinados lugares públicos para combatir un nuevo brote de infecciones por COVID, anunció la canciller Angela Merkel, tras una reunión de crisis.
“Necesitamos poner freno rápidamente al aumento exponencial de nuevas infecciones y de la ocupación de camas en unidades de cuidados intensivos”, declaró Angela Merkel tras una reunión de crisis con los jefes de gobierno regionales, competentes en materia sanitaria.
En las últimas 24 horas se detectaron 65,371 nuevos casos de coronavirus, según el instituto de vigilancia sanitaria Robert Koch (RKI), un alza inédita desde que empezó la pandemia.
La llamada norma “2G”, que permite que solo los vacunados (“geimpfte”) y los curados (“genesene”) accedan a lugares públicos como restaurantes o salas de conciertos, se aplicará cuando el umbral de hospitalización supere los tres pacientes de COVID por cada 100,000 habitantes, indicó, lo que ya está ocurriendo en la mayoría de las regiones del país.